Cada uno de mis alumnos tiene un color en especial. En sus rostros se dibuja un aura que los identifica sin igual. Si los veo jugar, reflejan un colorao incandecente y oloroso a juegos...Cuando estudian les veo tonalidades distintas, anaranjada la cara cuando entienden lo que se les explica, rosado cuando están soñando despiertos, y azul cuando reflexionan acerca de algo aprendido.
En ocaciones se ponen rojo colorado cuando se ofuscan o molestan pero enseguida toman su color natural: blanco inocencia.
Por eso pienso que los niños son un arcoiris inundado de risas y colores que nos llenan el corazón sin pedir nada a cambio solo amor y comprensión.
Pronto les enseñaré una hermosa canción titulada: En Miranda (estado de venezuela donde queda mi escuela)
En Miranda
L y M: Antonio Álvarez
I
Bordeando las riveras
los totumos y las palmas,
serpenteando los ríos
lagunas y montañas,
Se encuentra aquí enclavada
tierra grande y adorada
por hombres y mujeres
que le cantan a Miranda
Coro
En Miranda si,
Miranda sí,
Miranda: cielo, tierra, aire y mar...
(Bis)
II
Entre los valles verdes,
surgen riscos y cascadas.
las aves que revuelan
el cielo en las mañanas.
Y cuando el sol bosteza,
se engalana con estrellas,
del cielo hasta la tierra:
¡No hay igual en Venezuela!
(Bis coro)
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